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Me respondieron!

octubre 23, 2009

Después de haber hecho una crítica bastante dura hace ya un tiempo al tema de las concesiones de ecoturismo en varios de los Parques Nacionales Naturales en el país, y de casi haberme ganado a un «enemigo«, ya este asunto por más cuestionado que sea, con sus aciertos y desaciertos, finalmente se ha formalizado en 5 de los más de 50 Parques Nacionales Naturales del país.  Y como pasó con los hipopótamos o con el tema del «calentamiento global»,  esto del  ecoturismo en áreas protegidas, es de esos temas que tienen resonancia en un determinado momento, pero después no se dice ni mu sobre eso. Son como modas, cuando pasan no vuelven a sonar.

Actualmente estoy haciendo estudios de posgrado en geografía, y he empezado a desarrollar muchos elementos  para abordar de forma crítica los conflictos ambientales, especialmente en áreas protegidas. Pese a ello sigo pensando que el proceso de «mercantilizar» a la naturaleza e insertarla e una dinámica estricta de racionalidad económica, fortalece el proceso de simplificar nuestra relación con eso que llamamos ecosistemas, biodiversidad, áreas protegidas, etc.,  a través de muchas prácticas sociales, políticas y económicas y que se quiera o no, redundan en una serie de conflictos ambientales en donde unos ganan, otros ven oportunidades para resignificar el lugar en el que viven o simplemente otros pierden. Estos últimos por lo general son los más vulnerables y el asunto de la conservación, se convierte en una amenza, más que en una oportunidad. Pero por ahora no quiero ahondar en ello. Quiero contar algo que me pasó por estos días.

Resulta que planeando para un viaje que haré en enero, elegí como destino el Parque Tayrona,  uno de los parques concesionados. Vamos a ver que  pasa allá, si Germán Quimbayo está equivocado o no. Igual nada se pierde estando allá y conocer cómo está el asunto. Igual ese lugar es muy bonito, pese a los conflictos que tiene el territorio en el que está inmerso esa área protegida y vale la pena pegarse una «rodadita».  Entonces me decidí y quise consultar  en el portal de la concesión y cruzar los dedos para que no me pasara lo mismo que me ha pasado cuando visito otros parques. Y resulta que me respondieron de forma rápida, me brindaron toda la información que solicité (precios, logística, valores del lugar, etc.) y además de ello se encuentran dispuestos a escuchar cualquier inquietud. Eso realmente me impresionó. Pero vuelvo al mismo asunto, este modelo ¿para qué o quien se conserva? ¿si traerá beneficios a las comunidades?

Espero acercarme a la aplicación de ese «modelo» y verlo en práctica. Haré mi propio ejercicio de observación crítica en campo. Espero más adelante hablar más al respecto ya que he dejado ciertas taras mentales y radicalismos pendejos. Algunos le llamaran «madurez del discurso», otros dirán «este tipo se vendió». Yo simplemente pienso que uno debe mirar todo el espectro de un conflicto y encontrar las piezas faltantes para armarse la película completa. Aunque aún guardo mis dudas frente al tema, quiero comprobarlo en un caso real.

Por ahora espero no solo pasarla bien en mi viaje, sino traer más elementos para confirmar (o quizá hasta refutar) todo lo que he dicho sobre eso que es «ecoturismo» y si ese tema de la «sostenibilidad» desde la lógica empresarial es o no mentira, pues obvio, los empresarios buscan ganar plata, no conservar o amar la naturaleza por altruismo.

Saludos!

5 comentarios leave one →
  1. octubre 23, 2009 12:16 pm

    Y sin palanca!!! qué bien Germán, ya nos contarás qué tal la experiencia in situ.

    Un abrazo,

    Daniel

  2. Carolina Giraldo permalink
    octubre 23, 2009 9:10 pm

    siiiiiiiiiiiiiiiii!!!!! porfin entendiste que todas las cosas tienen varias caras y uno no puede quedarse con solo una de ellas, muy bien me parece!!!!. Esperamos una próxima publicación en donde nos cuentes esa otra visión de las cosas (viviéndolo desde allá). Un abrazo enorme!

  3. noviembre 9, 2009 5:20 pm

    Estoy segura apreciado Germán que nos harás buenos reportes de ese hermoso lugar. Es muy diferente desde tu óptica que desde la mía, sin duda alguna, y porque conozco el parque Tayrona y sus comunidades y sé de tu talento y espíritu ecológico, sé que serán un valiioso aporte, muero por leerte al respecto. Bueno, enero no está tampoco lejos.
    Ah!! y que tal si comienzas el año también con un escrito para equinoxio? Nos darías una grata sorpresa.

    Te abrazo y éxitos en tu post grado y, por supuesto, en tu viaje.

  4. Adriana Carreño permalink
    noviembre 16, 2009 11:29 am

    Hola German,

    Te sigo en twitter desde hace algún tiempo, y pasé por acá a leerte un rato, me parece super chevere e interesante tu propuesta. Soy samaria y en estos momentos me encuentro en Santa Marta, así que cualquier ayuda que necesites para llegar al Tayrona, me puedes contactar al correo.
    Las cabañas de la conseción me parecen excesivamente costosas, mientras que te puedes quedar en hamacas por tan solo $15.000 la noche.

    Un abrazo

    Adriana Carreño
    @radioheadgirl

  5. Germán A. Quimbayo permalink*
    noviembre 16, 2009 9:39 pm

    Gracias a todos por sus comentarios y mensajes. Espero poder hacer el trabajo «in situ» que menciona Daniel.

    Abrazos para todos!

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